¿Dónde va el gobierno?, ¿cuál es su agenda? En realidad, sólo hay una: maximizar su posición electoral. El problema es que está obligado a hacer círculos cuadrados permanentemente. Es lo que pasa cuando presides el gobierno de España gracias al apoyo de los partidos que aspiran a destruir España.
Así que por una parte ERC pide la retirada del delito de rebelión y por otra Sánchez tiene que advertir que si se ponen farrucos resucita el 155. Por una parte abandonan al juez Llarena a su suerte, pero tras la rebelión de la ciudadanía -incluída sus bases- encargan a una firma belga su defensa. Por cierto, que la broma del ‘sí pero no’ nos costará 544.982€. ¿Es que no hay abogados del Estado que hablen francés?
Por una parte, quieren elevar el IRPF a los ‘ricos’ que ganan más de 150.000€. Una medida ‘populista’ ‘Made in Podemos’ que afecta a apenas 91.000 contribuyentes y recaudará sólo cerca de 400 millones. Da igual. Lo importante no es el resultado sino la pedagogía: ricos malos. Y pocos. Y les hemos metido un palo. Exprópiese.
Los de Torra se quejan porque afectaría principalmente en Cataluña y -más en concreto- en su base electoral. Así que a ver cómo Sánchez vuelve a hacer volar los platillos de la mayoría necesaria sin que se le caigan.
¡Voilá! ¡Resucitemos a Franco! Eso funciona mejor que un Madrid-Barça. Pero de nuevo, como profanar un cadáver en contra de la familia es un delito hay que inventarse decretos ilegales basados en urgencias poco razonables. Tan poco razonables que el mismo decreto fija de fecha para la exhumación hasta fin de año.
Luego ‘si eso’ se retrasa la fecha con un nuevo decreto y seguimos entreteniendo a la parroquia, que de eso se trata. Y si el cielo se encapota sugerimos la necesidad de quitar la cruz del Valle de los Caídos o quitamos la misa de TVE. Alboroto garantizado.
Mientras tanto, al más puro estilo bolivariano pretenden desactivar al Senado que no controlan. Si la Asamblea Nacional te molesta, siempre puedes crear una Asamblea Constituyente… Un golpe de Estado “por toda la escuadra” que diría la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio. Me duele España.
