Por el centro de Madrid circula una persona mayor que suele resumir en una pancarta de cartón su opinión sobre la política. Con su gorra de “base-ball” se pasea por las calles comerciales enarbolando su opinión de cada día. La de hace un par de días decía simplemente: “Jefes cultos” que me vino a la cabeza tras ver y escuchar el debate de anoche entre la verdadera oposición al régimen (Vox) y los candidatos del gobierno (Sumar y PSOE).
De nuevo la inanidad y la estulticia presidieron un presunto debate entre candidatos de posiciones diferentes (Sumar y PSOE) donde ambos, sin ningún tipo de pudor, reconocían ser un mismo proyecto (lo que dejaba muy mal la invitación de Televisión Española), al mismo tiempo y de la misma forma que se reconocían parte del gobierno (vicepresidenta 2ª y presidente respectivamente) volviendo a hacer saltar las mínimas reglas de este tipo de debates confundiendo simples candidatos con cargos públicos.
Si el debate se hace entre los candidatos de los partidos mayoritarios en las Cortes Españolas, los únicos que deberían haberse enfrentado de nuevo en una especie de “partido de vuelta” eran Pedro Sánchez (por el PSOE se supone, no por la coalición “progresista” y el otro líder del “progresismo”: el Sr. Núñez Feijóo). Era una revancha al mal papel del actual presidente en funciones y candidato por el PSOE en el debate anterior, pero el gallego -ya se sabe- es un fino estratega. Al fin y al cabo ya estaba todo dicho…. En este caso, el invitado declinó la invitación y dejó paso a su enemigo declarado (Vox) que se vio así catapultado a verdadera y única cabeza de la oposición política, frente a dos adversarios. “Solo ante el peligro” era un reto que aceptó con cierto buen humor y tranquilidad frente a la crispación de ambos “colegas”.
Como ocurrió en el debate anterior, el director del mismo puso en evidencia su apoyo a quienes mandan tratando de descalificar a Vox (“ultraderecha”), sin que eso cuele ya en el respetable público. La presencia además en el debate de una formación sin representación parlamentaria era una novedad que viene a romper las inflexibles normas anteriores de un sistema cerrado bipartidista necesario para la “gobernabilidad” (no para la representación política de la soberanía nacional) por mucho que se sepa desde hace tiempo que el partido “Sumar” será la muleta del Sr. Sánchez junto con el resto de “coaligados” gubernamentales o “aliados” coyunturales de “mano tendida” en caso necesario (PP, PNV, ERC, etc.etc.).
A pesar de la mucha gestualidad de la vicepresidenta en funciones, sus mohínes sobreactuados y su aparente proyecto social “diferente”, no podía evitar el que -como le reprochó el Sr. Abascal- no lo hubiera puesto en marcha durante su etapa de gobierno (aún vigente por cierto). El mismo reproche que se podía hacer al Sr. Sánchez ante sus promesas vacuas de futuro. ¿O es que había que hacer que sus coaligados “pisaran tierra firme” para evitar más despropósitos todavía? (un rejonazo en todo lo alto del Sr. Sánchez a su “coaligada”, “amiga”, “vicepresidenta” y mano derecha de gobierno). Desde luego no aclararon nada. Y es lógico, llevaban el discurso ya cocinado por sus asesores sobre la “emergencia climática” donde, para no hacer el ridículo, serían necesarios “jefes cultos” (ni el Sr. Sánchez ni la Sra. Díaz parecen serlo) metiéndose en “jardines” científicos que les suenan pero que no son capaces de entender. Si lo dice Bruselas por algo será…. Y si, a Bruselas se lo dice EE.UU. también será por algo.
La Sra. Díaz hizo su introducción relacionando la actual ola de calor con el “cambio climático”, sin tener en cuenta el origen y motivo de estos episodios, salvo claro está el socorrido “mantra” del CO2 antropogénico. Para ello la Sra. Díaz soltó sin cortarse un pelo su proyecto de “reindustrialización verde”, un oxímoron en toda regla si se refiere a crear industria de cualquier tipo sin energía, tecnología o medios auxiliares. En definitiva: a no hacer nada más allá de banalizar y precarizar empleos -tal como ahora sucede- mientras sigue en marcha la mamandurria de la deuda pública (esa si es de la soberanía nacional) y el despilfarro público sin control real. Quizás le hubiera convenido saber antes de hablar que, el mismo día 19 de julio, se producía una llamarada solar M5.7 procedente de la región de manchas solares 3363, cuyo alto número se corresponde con el máximo del ciclo solar 2025 y que por tanto estamos en un “período con mayor actividad solar sobre el clima espacial, con dos eyecciones de masa coronal que llegaron a la Tierra en los últimos días, causando períodos de tormentas geomagnéticas”. Y que por mucha sobreactuación alarmista de sofocos de la Sra.Díaz, seguirá su curso natural.
Tampoco desaprovechó arrimar el “ascua” calorífica a su sardina el Sr. Sánchez que, adornado con el emblema de la “agenda 2030”, quería hacer llegar a la gente la necesidad de que pasaran pobreza e incluso hambre “para salvar el planeta para las generaciones futuras”. Un gesto enternecedor (como le dijo el Sr. Abascal) de la nueva cruzada misionera para la salvación del mundo, que en cambio no tiene en cuenta las necesidades del presente, las de cada día que la inflacción obscena del coste de vida que deben afrontar las generaciones actuales. Menos aún los despropósitos del “gasto político” clientelar de votos para mantener el poder. Menos aún la necesidad de un reajuste total en la organización del Estado que reduzca el coste de los servicios. Menos aún la austeridad ejemplar en el control del gasto público al que están obligados….
“El calor mata” repetían los coaligados una y otra vez, como si tuviesen una base objetiva para tales afirmaciones, cuando contrastados datos contra relatos, éstos demuestran justamente lo contrario: hay más muertes por frío que por calor, incluso en fases de episodios ocasionales como las llamadas “olas de calor”. Al igual que los datos del propio INE sobre el Covid tenían su lógica explicación. Esa que es necesario ocultar por los “bien pagaos”.
Como además se creen el ombligo del mundo con esas frases vacuas como la “solución ibérica” (al parecer aplaudida por el resto de la UE), desconocen que, contra todo lo que se está pronosticando (y fallando) por esos “paneles” de supuestos expertos (“…a un panel de rica miel -dinero- diez mil moscas acudieron…”), los datos reales indican lo contrario de lo que predican desde la propaganda del poder y que el movimiento ultra religioso y fanático del calentamiento global ignora que cada vez hay más hielo en ambos polos, que las temperaturas “altas” son las mismas (grado arriba o grado abajo) en un ciclo de hace 50 años (+40º/-20º) y, por más que inventen lo que inventen, el cosmos seguirá su camino y cada vez que se intente manipular a la gente creyéndola tan ignorante como ellos, ésta lo tomará como un insulto a su inteligencia (que todavía hay mucha afortunadamente) y les dará el corte de mangas correspondiente.