Hotel Ritz. Madrid. Lunes. Nueva Economía Fórum. Ministro de Industria y Turismo. Alcalde de Barcelona. Conseller de Generalitat catalana, CEO de America’s Cup. Reyes Maroto. Pepe Álvarez. Y lona en la Avenida de América: ‘Barcelona 24, anfitriona por naturaleza’. Imponente, anuncia la copa Louis Vuitton que actualiza las cien guineas que premiaban el triunfo. Todas las administraciones, dicen, apoyan. Pero, invitados o no, faltan la CAM y el Ayuntamiento madrileño. Sin Ayuso ni Martínez-Almeida. Con el lío PSC-ERC pendiente para la gobernabilidad en Cataluña que interfiere en el gobierno de coalición PSOE-SUMAR, hay algo que acentúa la puesta en escena: Prevista, a punto para la ocasión; y cara.
En prensa, a última hora de la noche o muy de mañana, página primera y noticia principal. Diario El País, pasquín oficioso PSOE. Firma Elordi hijo acompañado. Atentos al truque trueque PSC-ERC en curso. Cara amable de socialistas e independentistas. Afecta lo que puede estar en juego en Madrid y Barcelona. A tirios, en CC.AA populares, y a troyanos en autonomías PSOE. En principio, marca intención y ruta. Especulación, conversaciones para llenar tiempo y páginas. Hasta que haya pacto y cierren acuerdos, movimientos estratégicos. Para medirse unos a otros, teatro. Nadie conoce el guion y en función de quien sea, cuándo y cómo, improvisan todos. A punto, premeditado o como salga.
Al leer y pasar páginas, huele. Y no a ámbar, hiede. Parece una táctica o estrategia ajena u obediente. En titulares, algo que merece copia: Sánchez ofrece a ERC una financiación singular para Cataluña si apoya el Gobierno de Illa. El fiscal general descarta dimitir si lo imputa el Supremo. El FMI avisa de que los impuestos a energéticas y bancos deber ser “temporales”. Mbappé llama a votar contra la ultraderecha en Francia. La agenda mundial del espía CNI preso. La cumbre de paz en Ucrania acaba sin unanimidad. Las guerras de Putin y Netanyahu elevan el peligro atómico. Mbappé entra en campaña: “Estoy en contra de los extremos que dividen”. Recetas tharestistas frente a laborismo prudente. Negociaciones, equilibrios múltiples y promesas de poder. La UE estudia represalias a Georgia para detener la deriva autoritaria. Golpe a los ultras israelíes que tiran la ayuda a Gaza… Sánchez intenta seducir a ERC con “financiación singular” para investir a Illa. Esquerra afronta la pérdida de 330 cargos al abandonar el Gobierno catalán. El Gobierno corteja a sus socios catalanes con resultado incierto. “Baja un momento, Álvaro majete, que tenemos que hablar de compañero a compañero” precisa Peridis en viñeta genial. García Ortiz descarta dimitir si es imputado por desmentir los bulos del Gobierno Ayuso.
En el Ritz, Hereu, tras saludar a autoridades civiles y militares, usó su condición de ministro de Industria y Turismo para celebrar que la Copa de América se celebre en Barcelona. Magnífico proyecto para España. Modelo de colaboración público-privada. Vector deporte ante el mundo. Cultura del mar. Proyecto educativo. Atrae talento y gente Hace amigos. 135.000 empleos. El conseller de la Generalitat habló de revulsivo, prosperidad y edición en clave cultural. Producirá 1.200 mill. de euros. Abre el Mediterráneo, Cataluña como referente en el mundo. Hidrógeno verde. Ayuda a PYMES catalanas. Mejora economía y trabajo. Después, el alcalde dijo que Barcelona vuelve. Ciudad de mar. La copa transformará la ciudad y el Puerto. Legado azul. 5.000 m2 para empresas. El CEO de America´s Cup, antípoda en Nueva Zelanda y contento en Barcelona, habló de diversidad, competición para mujeres y jóvenes. 1.500 mill. de espectadores. Navegación en la que prima la tecnología. Nadie queda segundo. Necesidad de apoyo de Madrid para que el evento llegue a todo el mundo. Equipos de 150 personas con solo 12 navegando. Remató el alcalde con frase hecha: Hoy es un gran día viniendo a Madrid.
Habrá más sobre la America’s Cup 2024. Hoy, el acto en el Ritz, sirvió para dos propósitos: El detectado en El País, que tapa problemas de corrupción y judiciales del sanchismo. Y el evitente que, tras la historia de una competición deportiva y naval premiada en su inicio con una antigua moneda de oro inglesa, equivalente a 21 chelines, usada en el Reino Unido antes de que adoptara el sistema decimal en 1971, aprovecha el Gobierno con Louis Vuitton, pero sin cien guineas.