A estas alturas del guion, no hay que buscar intermediarios ni en García Egea ni en Rodríguez, ellos han influido no cabe duda pero ahora la lucha está en las alturas, y será difícil sacarla del cuerpo a cuerpo. Porque se ha llegado hasta aquí, ha habido errores tácticos, estratégicos y personales, pero en el fondo solo es por la lucha de poder. No cabe pensar que Ayuso luche contra Casado por el poder de Madrid, que ya lo tiene, solo cabe verlo en clave del gran poder de luchar por la Presidencia de Gobierno de la Nación. Tampoco cabe suponer que Casado luche contra Ayuso por otorgarle el poder en Madrid, que ya lo tiene, lo que no quiere es su sombra en la lucha por la Presidencia de Gobierno, y no solo para las próximas elecciones generales, sino también para las siguientes elecciones generales, caso de no alcanzar el Gobierno en la próxima cita electoral.
¿Cuál es la estrategia de Ayuso?, primero que nada, mostrarse como la única posible alternativa a Sánchez, una vez que Casado fracasase en su intento a llegar a la Moncloa en la próxima cita. Además de crecer en su afán de víctima tanto de Sánchez como de Casado, que con el actual enfrentamiento lo está consiguiendo. Y si su lucha por Madrid no se cierra a su conveniencia, podría llevarle a enfrentarse con Casado en el próximo Congreso Nacional del PP, y no solo con palabras sino con hechos.
¿Que pretende Casado? Lo único que parece es que quisiera perpetuarse como candidato a la presidencia del Gobierno en las dos próximas elecciones. Parece una osadía sacrificar el crecimiento del partido con un enfrentamiento interno en el PP, que puede llevarle a perder las próximas elecciones generales, y por ende posiblemente a la renuncia a presidir su partido.
A priori parece muy fácil pensar que necesitan pactar, para seguir creciendo y abriendo el abanico de posibilidades, pero el problema ya, es la desconfianza mutua, ninguno de los dos se fía del contrario, y eso es muy difícil de curar. Dicho esto si hay enfrentamiento el que mejor maneje a los barones ganaría la batalla, Casado tiene el poder interno, pero Ayuso empieza a ganarse el poder mediático y popular, empieza a tener mejor valoración e intención de voto. A mí no me convence ninguno de los dos, Yo personalmente estaría más predispuesto a entregar mi voto a los Presidentes de Andalucía, Galicia o Castilla y León, o al alcalde de Madrid sin lugar a dudas, pero Yo soy solo uno y hay 47 millones de españoles. Pero Casado no debe olvidar que ganó en segunda vuelta con el apoyo de Cospedal que ya no está, con la increíble no presentación de Feijóo, y perdiendo en el voto de los militantes, Yo en su lugar lucharía por pactar.
Hoy por hoy Ayuso tiene muchas lagunas, no es diputada nacional y no puede enfrentarse a Sánchez más que en los medios de comunicación y eso merma mucho. Podría ser Senadora, pero ya se observó con Hernández Mancha que el enfrentamiento en el Senado no es de la misma dimensión y además le falta rodaje en la política Nacional. Por otra parte Ayuso puede obtener más votos de Vox, pero si solo es de Vox, la Ley electoral castigaría a Vox y al sumando PP+Vox, la clave estaría en si Ayuso puede sumar algo del centro izquierda. Yo pienso que todavía es pronto para Ayuso y le interesa más esperar el fracaso de Casado, para ser llevada en volandas a la Presidencia del PP.
Me niego a reducir la política como una lucha personal (Sánchez, Casado, Ayuso…) tal como se pone de manifiesto en el artículo. Tampoco en clave electoral única en una representación falsa de la «soberanía nacional».
Dicho ésto estoy totalmente convencido de que la Sra. Ayuso por ser un «verso libre», no sometida al mandato imperativo inconstitucional de los partidos hacia sus diputados, se ha proyectado públicamente por la sola razón del éxito de su gestión en tiempos difíciles, mientras se ha demostrado la incapacidad, inutilidad, mentiras y sometimiento de otros.
En efecto, el Sr. Casado parece no dar una y su comportamiento infantil desde el principio para tratar de imponer su autoridad, se está llevando por delante a quienes le hacen sombra. La «autorictas» verdadera no se compra ni se vende. Se tiene o no se tiene.
En cuanto al alcalde de Madrid, se lo regalo para Reyes….
Un saludo.