¿Saben una cosa? No es lo mismo escribir o decir polémica, que escribir o decir rechazo. No hay color entre una cosa y la otra, y es que hay que utilizar el lenguaje con propiedad.
Con esto me refiero a las declaraciones hechas por el escritor Yann Moix, que como bien saben ustedes, o si no lo saben se lo voy a contar ahora mismo, dijo hace unos días que las mujeres de más de 50 años son invisibles para él, que son demasiado viejas. Y a consecuencia de estas declaraciones he podido leer que estas afirmaciones han suscitado la polémica.
Yo no veo ninguna polémica en esto en las redes sociales, pero lo que si he visto es un rechazo tanto por parte de hombres como de mujeres, a tan absurdas declaraciones. Por eso me gusta matizar y que queden claros los términos.
Y hablando de Yann Moix, porque hablaremos de él, aunque sea eso lo que busca este tipo con sus declaraciones: publicidad de mal gusto para sus libros, que lo mismo es que no se venden lo suficiente. Es curioso que un hombre sea capaz de decir, con estas afirmaciones, que verdaderamente lo único que le llama de una mujer es su aspecto físico y su juventud, sobre todo por un hombre nacido en el 1968, y que ahora tiene también 50 años.
La estupidez y superficialidad de sus palabras, desde luego lo definen, a pesar de que haya ganado el premio Gouncurt, pero además de la estupidez, las declaraciones de Yann Moix destilan un tufo machista y racista, cuando abunda diciendo que prefiere los cuerpos de mujeres jóvenes, y también orientales, como si el amor o la atracción entre dos personas solo dependiera de su físico. Si así fuera es posible que la especie humana hubiera desaparecido hace ya mucho tiempo.
Tal vez no soy tan importante, ni escribo tan bien con el señor Moix, pero desde luego lo que si tengo claro es que el amor o la atracción es algo mucho más profundo y trascendental que un contacto visual o físico con alguien que nos gusta, y desde luego lo que también tengo claro, es que las mujeres hace ya mucho que buscamos gustarnos a nosotras mismas, que la edad en mujeres u hombres es un rasgo más de la vida, y que la belleza no reside en lo externo.
Claro que para un machista y un misógino que coloca a la mujer a nivel de un objeto, como ha hecho Yann Moix, no le queda más que la pobreza de estos argumentos. Pobre hombre, tanto libro y tanta erudición para al final ser recordado por esto. Claro que más vale que se vayan cayendo las máscaras para saber quién es quién y donde está cada uno. ¿Saben? No leo libros de misóginos.